El feroz incremento de los impuestos en la provincia de Buenos Aires generó un fuerte rechazo de los contribuyentes y hasta el presidente, Javier Milei, se manifestó a favor del llamado a la “rebelión fiscal” que hizo José Luis Espert.
Sin embargo, el aumento tributario no parece ser una medida exclusiva del Gobierno bonaerense, sino que también podría repetirse en otras jurisdicciones, debido a la falta de fondos que generó el recorte de transferencias de la Nación.
Al menos así lo manifestó el periodista Francisco Olivera en su artículo para La Nación en el que consultó a Diego Fraga sobre el impacto que generó una de las medidas impulsadas por la administración de Axel Kicillof: el adelanto extraordinario.
El socio de Expansion Business recordó que los contribuyentes bonaerenses “se enteraron de su nominación al ser notificados electrónicamente y a escasos días de la fecha de pago”.
“Algo nunca visto”, remarcó sorprendido y agregó que, con esta medida tan intempestiva, “se violó el principio más sagrado en materia de tributación, que es el de legalidad”.
Además, aclaró que “no llega a ser siquiera un empréstito forzoso porque, en la mayoría de los casos, luego de pagar el anticipo, los saldos se irán licuando hasta el momento en que puedan ser utilizados”.
Y, para concluir, sostuvo que “la inclusión de quienes no abonen el anticipo en la máxima categoría de riesgo fiscal durante 12 meses es una sanción sin posibilidad de defensa”.
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